Estudio advierte que ayudas estudiantiles son insuficientes para costear el alquiler en la capital del Reino Unido.
Por Leonardo Núñez
La educación universitaria en Londres vive una “crisis por los costos de aprendizaje”. Esa es la conclusión de los expertos tras darse a conocer un estudio que reveló que los préstamos del Gobierno para los estudiantes con menos recursos, no alcanzan a cubrir el precio de los arriendos de vivienda.
Esto estaría amenazando la educación de los jóvenes que, con mucho esfuerzo, lograron matricularse en alguna de las prestigiosas universidades asentadas en la capital del Reino Unido.
La alerta estalló luego que “The Times” diera a conocer un análisis de los costos de vivienda enfocado en la educación universitaria, el cual concluyó que el arriendo estudiantil promedio alcanza las 13,595 libras. La cifra supera por primera vez el préstamo máximo para estudiantes en Londres, de 13,348 libras.
El grupo de expertos de Higher Education Policy Institute (HEPI), que coprodujo el estudio, solicitó formalmente al gobierno que incremente el apoyo a los estudiantes más pobres, los cuales podrían verse obligados a abandonar los estudios por no poder pagar por un lugar dónde dormir.
El estudio se conoce un mes después de que el Gobierno anunciara que aumentaría en un 3,1% los préstamos universitarios de mantenimiento, los cuales estuvieron congelados por una década. La cifra es insuficiente, ya que los costos de alquiler en la ciudad han aumentado en un total de 18% en los últimos dos años, según el análisis.
El director de HEPI, Nick Hillman, consideró que las cifras eran “impactantes” y señaló la necesidad urgente de una revisión nacional del mantenimiento de los estudiantes.
En tanto, Universities UK, el grupo de presión del sector, dijo que el aumento de los préstamos del gobierno fue un paso en la dirección correcta, pero que no es suficiente.
“Si el gobierno quiere promover la movilidad social, debe revisar estos paquetes de apoyo para garantizar que las personas de orígenes más desfavorecidos no se vean privadas de la oportunidad de ir a la universidad —o a la universidad de su elección— debido a los costos”, indicó la agrupación.
El análisis fue realizado por Unipol, la organización benéfica de vivienda para estudiantes más grande del Reino Unido, utilizando datos de la Encuesta trienal de costos de alojamiento, la cual data desde 1967 y que este año se centró únicamente en Londres.
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