Con esta legislación, Chile busca alinearse con estándares internacionales en materia de seguridad al interior del hogar.
Por Leonardo Núñez
Por unanimidad, con 124 votos a favor, la Cámara de Diputadas y Diputados aprobó el proyecto de ley que obliga la instalación de detectores de humo y monóxido de carbono en viviendas nuevas y edificaciones destinadas al alojamiento, dando un paso significativo en la actualización de la normativa chilena en materia de prevención de incendios y seguridad doméstica.
De esta manera, la propuesta, nacida de tres mociones refundidas, fue remitida al Senado para su segundo trámite legislativo. Durante el debate legislativo, se indicó que la iniciativa busca fortalecer la protección de las personas frente a emergencias por fuego o intoxicación, estableciendo como obligatoria la incorporación de estos dispositivos autónomos de detección y alarma en todos los niveles de las viviendas unifamiliares y colectivas, así como en cada habitación de hoteles, hostales y residenciales.
Además, se establece que los propietarios deben garantizar el correcto funcionamiento de los detectores al momento de vender o arrendar una propiedad.
En cuanto a los arriendos, el texto reconoce el derecho de los arrendatarios a contar con estos sistemas de alerta. En caso de que la vivienda no cuente con ellos, los inquilinos podrán instalarlos con el consentimiento del propietario o titular de la vivienda, con cargo al valor de la mensualidad.
Los legisladores recalcaron que esta medida convierte la seguridad en un derecho y no en un privilegio, y que la prevención de incendios no debe considerarse un gasto sino una inversión en vidas humanas.
Con esta norma, la legislación chilena se pone al día con una práctica ampliamente extendida en países desarrollados, donde los detectores de humo son obligatorios por ley en la mayoría de los hogares. A continuació, algunos ejemplos:
Estados Unidos: En la mayoría de los estados, la instalación de detectores de humo es obligatoria en cada nivel de la vivienda, dentro y fuera de las habitaciones, según lo dispuesto por la National Fire Protection Association (NFPA). También se exigen detectores de monóxido de carbono en viviendas con fuentes de combustión.
Canadá: Todas las provincias requieren detectores de humo en todos los hogares. Además, las regulaciones exigen dispositivos interconectados, lo que significa que si uno se activa, todos lo hacen simultáneamente.
Reino Unido: Desde 2022, la ley exige que todas las viviendas arrendadas cuenten con detectores de humo en cada planta y detectores de monóxido de carbono en habitaciones con aparatos de combustión.
Australia: La mayoría de los estados exige la instalación de detectores fotoeléctricos conectados a la red eléctrica con respaldo de batería, en todos los niveles del hogar y cerca de los dormitorios.
Estas regulaciones han demostrado ser eficaces: según la NFPA, los hogares sin detectores de humo representan más de la mitad de las muertes por incendios residenciales. La simple presencia de un detector funcional puede reducir a la mitad el riesgo de fallecer en un incendio doméstico.