"Así como existió la edad de piedra o la edad de bronce, hoy vivimos en la edad de las ciudades", señalaba nuestro premio Pritzker Alejandro Aravena en la conferencia de Larraín Vial, en 2016. Un dato revelador es que, recién en 2008, la población urbana mundial superó a la rural. Las ciudades, con su concentración de servicios y oportunidades, se han convertido en polos de atracción para las personas.