El magister en diseño arquitectónico y Fundador de Ey! Atelier cuenta su exitosa experiencia con la intervención de hoteles en el barrio histórico capitalino.
Por Leonardo Núñez
En un año donde la recuperación de los barrios y la protección del patrimonio ha sido parte del debate público, el deterioro de Santiago Centro es uno de los fenómenos que más preocupaciones sigue generando. El éxodo de sucursales de importantes empresas y de centros comerciales no se detiene. Y el sector ha sido calificado de alta peligrosidad para turistas.
Sin embargo, hay señales que dan cuenta de que la recuperación aún es posible, según la visión de Jean Paul Eyssautier, magister en diseño arquitectónico y Fundador de Ey! Atelier. El profesional conoce Santiago centro y su potencial. Ha realizado exitosas intervenciones de emblemáticos hoteles en la zona. Por ello, no pierde la esperanza de que el barrio histórico resurja como en sus mejores momentos.
“Santiago Centro aún conserva características esenciales que lo hacen un lugar estratégico para su recuperación, algo que he podido comprobar directamente a través de mi experiencia reciente en la transformación de tres edificios icónicos en Plaza Italia, epicentro del estallido social. En una zona que parecía inviable para proyectos inmobiliarios, logramos transformar dos hoteles vandalizados y totalmente destruidos en edificios de renta residencial, y estamos a punto de inaugurar el restaurante La Hacienda Gaucha, un símbolo histórico del sector”, señala.
“La recuperación de estos hoteles no solo fue un éxito arquitectónico, sino también inmobiliario. En apenas dos meses, prácticamente todos los departamentos fueron arrendados, y lo hicieron con precios que superaron a la competencia en sectores más consolidados. Esto no sólo valida la resiliencia de Santiago Centro, sino también su potencial como foco de regeneración urbana y económica. A pesar del deterioro y las adversidades, la demanda demostró que las personas siguen viendo valor en vivir y trabajar en el corazón de la ciudad”, agrega el arquitecto.
–¿Cuál es el estado actual de su barrios más emblemáticos?
“El deterioro es enorme y, sin duda, es el mayor desafío que enfrenta la comuna. Este deterioro no sólo afecta la percepción de los residentes, sino que también desincentiva a los inversionistas. Hemos visto cómo el aumento de la segmentación y los índices de violencia, especialmente hacia el sur y el poniente del eje Alameda, ha tenido un impacto directo en la calidad de vida. A diferencia de estas áreas, la zona norte, con su carácter más patrimonial, conserva cierta estabilidad, aunque no está exenta de riesgos”.
–¿Y cómo evitamos su deterioro?
“Cuando camino por lugares emblemáticos como el Barrio Franklin o Yungay, lo que percibo es nostalgia de lo que estos sectores fueron en el pasado. Sin embargo, también hay un potencial latente. Si bien estas áreas han perdido parte de su atractivo, creo firmemente que podrían transformarse nuevamente en polos interesantes con un enfoque temático y con el apoyo adecuado. Pienso, por ejemplo, en la zona de la Plaza de Armas, o el Mercado Central, que siguen siendo símbolos vivientes del comercio y la cultura popular. Igualmente, el Parque Forestal y otras plazas de la zona, que históricamente han sido espacios de encuentro, siguen siendo fundamentales en el paisaje urbano, aunque sus alrededores requieran una atención urgente”.
–¿Qué destacaría como señales de recuperación?
“Es cierto que la seguridad y la infraestructura deben mejorar, pero con una colaboración efectiva entre el sector privado y público, se podrían revitalizar espacios como las plazas, ejes como Vicuña Mackenna o Lastarria, y restaurar edificios históricos y monumentos que representan la identidad de la ciudad. Mi experiencia en proyectos como la rehabilitación de edificios en Plaza Italia me hace ver que es posible recuperar estos espacios. En este caso, la respuesta del mercado fue rápida y exitosa, lo que demuestra que, a pesar de los desafíos, la gente sigue queriendo vivir y trabajar en el centro de la ciudad. Si logramos alinear a todos los actores para proteger y mejorar estos barrios clásicos, Santiago Centro podría volver a ser el referente que alguna vez fue, un lugar de encuentro, cultura y comercio”.
¿Por qué tipo de políticas privadas y públicas habría que apostar para una mejor recuperación?
“Las políticas tanto privadas como públicas deben estar alineadas y ser estratégicas. En términos de inversión privada, es esencial seguir apostando por el comercio y la vivienda. La demanda por espacios residenciales en el centro sigue siendo alta, especialmente por la cercanía a la vida urbana, la conectividad y el acceso a la cultura y el comercio. En cuanto a las oficinas, se ha dado una disminución significativa debido al auge del trabajo remoto. Sin embargo, todavía hay un porcentaje de personas que estaría dispuesta a trabajar en el centro, sobre todo por la ubicación y los precios más competitivos que ofrece respecto a otras zonas de la ciudad”.
Jean Paul Eyssautier seleccionó para “El Diario Inmobiliario” barrios clásicos de grandes ciudades que pueden servir de ejmplo para recuperar Santiago Centro.
Distrito 22@ (Barcelona): “Se trata de un caso inspirador para Santiago Centro. Una zona industrial se transformó en un espacio de uso mixto con viviendas, cultura e innovación tecnológica. Este modelo destaca por integrar edificios históricos en un entorno moderno, algo replicable en sectores con patrimonio”.
Los Docklands (Londres): “También son un referente, habiendo convertido un antiguo puerto industrial en un área vibrante de oficinas, viviendas y espacios públicos. Su enfoque en infraestructura moderna y espacios verdes podría ser clave para revitalizar áreas deterioradas en Santiago”.
Meatpacking District (Nueva York): “Es otro ejemplo valioso, donde la identidad histórica del barrio fue preservada al tiempo que se revitalizó como un centro cultural, comercial y residencial. Barrios como Yungay o Franklin podrían seguir este modelo para potenciar su carácter patrimonial”.
Puerto Madero (Buenos Aires): “Muestra cómo transformar un puerto en desuso en un distrito de lujo con viviendas y espacios verdes, destacando la importancia de la sostenibilidad y la conexión con el entorno urbano. Estos casos demuestran que un enfoque equilibrado entre modernidad, tradición y usos mixtos puede transformar Santiago Centro en un espacio dinámico e inclusivo”.
El magister en diseño arquitectónico y Fundador de Ey! Atelier cuenta su exitosa experiencia con la intervención de hoteles en el barrio histórico capitalino. Por Leonardo Núñez En un año donde la recuperación de los barrios y la protección del patrimonio ha sido parte del debate público, el deterioro de Santiago Centro es uno de […]
