
Durante décadas la política habitacional se concentró en la cantidad de unidades entregadas, dejando de lado la calidad de vida de quienes las habitan. Se instaló una persistente dicotomía: ¿cantidad o calidad? En los últimos años, la incorporación de nuevas tecnologías constructivas ha elevado el estándar de la vivienda económica.
El Plan de Emergencia Habitacional (PEH) ha sido una política clave del Gobierno actual para abordar el Déficit de viviendas en el país, por lo que entender las consecuencias de su vigencia por 4 años más o su posible discontinuidad, es generar un panorama con perspectiva más allá de quién gane en las elecciones, por su relación con la política habitacional y urbana de este eje.