Esta propuesta se plantea como una alternativa temporal para responder de manera inmediata a situaciones críticas.
Por: Tomás Rodríguez Botto
En un complejo escenario habitacional que atraviesa el país, donde cerca de 114 mil familias se encuentran viviendo en asentamientos informales, sumado a más de un millón de hogares que necesitan del apoyo del Estado, es que desde TECHO-Chile junto a Déficit Cero han presentado la propuesta de implementar barrios transitorios para dar solución habitacional de forma temporal.
Los barrios transitorios se implementan especialmente para personas en situación de emergencia o vulnerabilidad habitacional, como víctimas de desastres o familias que necesitan reubicarse desde asentamientos en riesgo. Este tipo de barrio ofrece infraestructura básica, como agua, saneamiento y electricidad, y sirve como un lugar seguro mientras las personas avanzan hacia una vivienda adecuada.
En ese sentido, Trinidad Vidal, directora de políticas públicas de Déficit Cero, señaló que “lo mencionamos como propuesta porque permite abordar necesidades urgentes de vivienda mientras se desarrollan soluciones definitivas, promoviendo la dignidad y el bienestar de las familias durante este proceso”.
En tanto, Carola Hidalgo, directora de comunicaciones TECHO-Chile, agregó que la implementación de un barrio transitorio requiere asegurar la conexión de las viviendas de emergencia a servicios básicos, como agua potable y alcantarillado, así como dotarlas de energía eléctrica e iluminación pública.
“Además, se construyen sedes multiuso que funcionan como espacios de apoyo comunitario y de coordinación para el desarrollo del plan de acción social asociado al proyecto. Otro elemento esencial es establecer un control efectivo para evitar el repoblamiento o la expansión descontrolada del barrio, garantizando una adecuada gestión social y administrativa del espacio”, complementa Hidalgo.
Eso sí, la propuesta está especialmente dirigida a hogares que residen en campamentos y enfrentan riesgos asociados a desastres naturales o desalojos inminentes.
Por otra parte, en relación al tiempo de duración de un barrio transitorio, Trinidad Vidal, señaló que “en general se espera que su uso sea temporal, con una meta de entre 2 y 3 años. Sin embargo, es absolutamente fundamental que durante este periodo se gestione activamente la transición de las familias hacia viviendas permanentes para evitar que estos barrios se conviertan en asentamientos definitivos”.
Eso sí, Carolina Hidalgo, agrega que “en ciertos casos, la infraestructura de los Barrios Transitorios pueden adquirir un carácter más permanente, donde los hogares son quienes habitan de manera transitoria, sin que ello implique necesariamente el desmantelamiento del barrio, facilitando así el tránsito de más familias por él”.
