El uso de tecnologías, inteligenci artificial y sustentabilidad serán los puntos clave para el sector inmobiliario.
Por: Renato Herrera Lagos
Tras estos primeros meses del 2024, el mercado inmobiliario sigue siendo uno de los focos más importantes en lo referente a economías de los países del cono sur, dónde Estados Unidos, México, Brasil y Chile, marcan la pauta.
Es por ello que se prevé importantes cambios en lo relativo a las tendencias y manera de invertir, pues las inclinaciones inmobiliarias van por el uso de la tecnología como uno de los mecanismos más importantes para entregar dinamismo. Una de ellas, por ejemplo, la inteligencia artificial.
Inmuebles fraccionados como una opción cada vez más relevante, abriendo nuevas oportunidades para inversionistas de diferentes perfiles. Sobre todo en los chilenos, que tienen mayores oportunidades por la entrada en vigor del tratado que evita la doble tributación entre Chile y EE.UU.
Cifras dan cuenta que la inversion inmobiliaria fraccionada se abre paso en el sector inmobiliario de manera rápida, pues antecedentes de Grand View Research, se espera que el mercado global de tokenización de bienes raíces alcance los 22.4 mil millones de dólares para 2027, con una tasa de crecimiento anual compuesta (CAGR) del 42.2%. Además, se proyecta que para el año 2030, el 10% del PIB mundial estará tokenizado.
Los destinos principales para la inversión inmobiliaria tokenizada incluyen a Estados Unidos, Reino Unido, España, Singapur, Suiza, Australia, así como en Latinoamérica: México, Brasil, Argentina, Chile y Colombia.
Sobre este punto, Daniel Pardo, CEO de Wbuild, destaca la aparición de la inversión inmobiliaria fraccionada, permitiendo la participación en megaproyectos con un ticket de entrada mucho menor y así democratizar la accesibilidad para diversos inversionistas. “La tecnología blockchain nos permite reducir sustancialmente los costos y simplificar el proceso de inversión para que sea 100% online, accediendo a estructuras de inversión optimizadas tributariamente, generalmente disponibles sólo para altos patrimonios. Invertir en proyectos de gran envergadura es costoso y complejo para todo tipo de inversionistas, lo que además limita la capacidad de diversificar y diseñar un portafolio personalizado”, sostiene.
En cuanto a la inversión promedio, se observa que para las empresas, el ticket promedio ronda los 30,000 dólares, mientras que para los inversionistas minoristas, la cifra es de 1,300 dólares. “El mercado de Florida en Estados Unidos ha sido especialmente atractivo, con un notable crecimiento en 2023, superando incluso a estados como Washington DC y Nueva York, alcanzando un valor total de 160 mil millones de dólares”, señala Pardo.
Inteligencia Artificial llega a potenciar la gestión inmobiliaria
Principales tendencias proyectadas
Las principales tendencias que se aproximan de cara a este 2024 hablan del trabajo de la Sustentabilidad, ya que la conciencia sobre el cambio climático impulsará la preferencia por propiedades con energía renovable, sistemas de ahorro y materiales sostenibles.
Inteligencia Artificial o también conocida como IA, será una herramienta clave para impulsar la sostenibilidad y gestionar riesgos climáticos, así como para funciones de monitorización en la cadena de valor inmobiliaria.
Hablando de transformación digital, seguirá transformando la experiencia inmobiliaria, desde la búsqueda de propiedades hasta la firma de contratos, con visitas virtuales y herramientas de análisis de datos más comunes.
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En un contexto de restricciones crediticias e inestabilidad económica, la inversión fraccionada y su tecnología asociada se posicionan como una alternativa cada vez más utilizada, permitiendo la diversificación y acceso a inversiones previamente restringidas.
Los inversionistas buscarán propiedades que ofrezcan seguridad y estabilidad en tiempos de incertidumbre económica.
Finalmente, la inversión inmobiliaria tokenizada es una tendencia que se espera que crezca significativamente en los próximos años. Esta modalidad de inversión ofrece varias ventajas a los inversionistas, como la accesibilidad, la diversificación y la liquidez.