La Organización de las Naciones Unidas donó 48 inmuebles para los damnificados que tienen un tamaño de 17,5 metros cuadrados y fueron diseñados con un marco de acero galvanizado.
Según la información entregada por LUN, La Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) de la ONU donó 48 viviendas sociales para las personas afectadas por los incendios en la quinta región.
Cada propiedad tiene un tamaño de 17,5 metros cuadrados y tiene una duración de 18 meses, ese tiempo se podría extender hasta cinco años más si la vivienda tiene un adecuado mantenimiento y sí el clima también así lo permite.
De acuerdo a la información entregada por LUN, estos hogares fueron creados por la compañía social Better Shelter y la fundación IKEA esto bajo los pedidos exclusivos de la ACNUR.
Además, cada inmueble tiene un peso de 161 kilos, además incluye un marco de acero que está hecha de diez postes verticales, en donde está instalado el techo y las paredes de plástico semiduro.
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Asimismo, cada propiedad contiene ventanas, una puerta con llave, panales para hacer dormitorios, revestimiento del suelo y un método de anclaje al terreno en donde está instalada la casa.
Cada vivienda tiene un proceso de construcción de aproximadamente seis horas contemplando que cuatro personas estarán encargadas de instalar la casa.
La jefa de la oficina nacional del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los refugiados en Chile, Rebeca Cenalmor-Rojas comentó que está medida pueda asistir a los damnificados por los siniestros. “Esperamos que está contribución y las otras que estamos realizando sean efectivas para brindar la dignidad y cubrir las necesidades más urgentes de las comunidades que lamentablemente, lo perdieron todo a raíz de los incendios”.
El arquitecto urbano, Uwe Rohwedder comentó su opinión sobre si este tipo de casas se podrían construir en otras ciudades de Chile. “En general si se puede, se podrían llevar a otros lados porque son diseños que son fáciles de montar y de desmontar y podría ser transportable. Ahora dependiendo de la zona del país, puede que uno tenga que ponerle más o menos aislantes, lo más importante es decidir en qué parte colocarlas”.
Asimismo, el académico de la Universidad Central añadió su punto de vista sobre si este tipo de viviendas se podrían comercializar a futuro por otras empresas “Yo creo que debería quedar como donación, igual siempre alguien puede encontrarle la manera de transformarlo en un negocio, una donación se puede transformar en un negocio siempre cuando el fin sea social”.
Además, Rohwedder agregó que está ayuda siempre “va a ayudar porque el tamaño de la tragedia es inmenso, yo creo que cualquier iniciativa que venga en ayuda siempre es bienvenida.
Sobre la planificación futura de la reconstrucción de estos inmuebles dañados por los siniestros, el experto opinó que “hay que mapear bien todos los sectores, no hay que volver a construir en las zonas dañadas, hay que tener un plan de evacuación vigente lo cual implica ensanchar calles, tener un plan de limpieza de todos los lugares semi rurales y tenemos que agregar especialistas que estudian el clima”.
El desarrollo inmobiliario en la sostenibilidad es un factor clave en la lucha contra el cambio climático, dado su alto impacto en el medio ambiente y por el impacto medioambiental negativo de la construcción tradicional.
La Carrera hacia el Net Zero exige un compromiso integral para descarbonizar tanto edificaciones existentes como futuras. Aunque el sector inmobiliario contribuye significativamente al 40% de las emisiones globales de carbono, únicamente el 18% de las organizaciones inmobiliarias cuenta con un plan de sostenibilidad.
Por: Gabriela Catalán, jefa de Proyectos de Infraestructura de Arcadis Chile Como consecuencia de los cambios sociopolíticos a nivel mundial, la globalización de la economía, los efectos de la pandemia y el acelerado desarrollo tecnológico, se está produciendo una transformación en las distintas formas de trabajar y, en particular, en el quehacer de la ingeniería. […]