“Mi papá compró tres asientos muy baratos en el Monumental cuando Colo Colo cayó en quiebra y hoy valen millones”, cuenta uno de los afortunados.
Por Leonardo Nuñez
“¿Y si vendemos los palcos?”. El patriarca de la familia Aguilera, medio en broma, medio en serio, a veces les plantea esta preguntas a sus hijos cuando tocan el tema de los tres asientos que tiene en el Estadio Monumental.
Cristóbal Aguilera, de 28 años, cuenta a “El Diario Inmobiliario” que su padre compró los tres asientos cuando Colo Colo cayó en la quiebra, hace más de dos décadas ya: “El club necesitaba recuperar plata y vendía los asientos muy baratos. Tenemos tres en Océano. Son asientos muy codiciados y son de mi padre de forma vitalicia. Él los compró en 300 mil pesos cada uno y hoy valen millones”.
“Y, la verdad, la experiencia ha sido muy buena”, agrega. Es que no solo puede ver los partidos del club del que es hincha de toda la vida cuando quiera, sino que además tiene derecho de asistir a todos los eventos que se realicen en el Monumental. “He visto partidos de la selección chilena y también conciertos, como el de Pink Floyd (Roger Waters) el año pasado. Y puedo invitar a mis amigos, menos a los que son hincha de la Católica”.
Junto con la venta de publicidad y de derechos por el uso de marca, arriendo de espacios, administración de estacionamientos, la venta de palcos es otro de los muchos negocios que giran en torno a proyectos de infraestructura deportiva. Pero los palcos tienen una connotación adicional, ya que se les considera como un activo inmobiliario más. Esto debido a que, con el paso de los años, pueden generar rentabilidad.
“En nuestro caso, los asientos no tienen costos de mantención ni generan gastos. Los hemos valorizado a la rápida y cada uno cuesta sobre 12 millones de pesos. Pero no queremos venderlos. Aunque si sumas…. son varios millones”, concluye Cristóbal.
El caso de Bastián es algo diferente. Ese no es su nombre, ya que prefiere el anonimato por temas de seguridad. “Yo tengo 12 asientos en un estadio y se gana harto por el derecho a las entradas. Los partidos internacionales y los conciertos son los más demandados. Trato de venderlas con intermediarios porque me preocupa que sepan que tengo estas entradas disponibles; hoy no se puede confiar en nadie, te secuestran por 100 lucas”.
La venta de palcos también ha sido un éxito en el marco del plan de remodelación del estadio San Carlos de Apoquindo. El recinto de la Universidad Católica contará con 22 suites en la tribuna Sergio Livingstone, más 24 palcos en la tribuna Alberto Fouillioux. Estos nuevos espacios que serán implementados se pueden considerar como verdaderas propiedades para quienes los adquieran, ya que se administrarán como departamentos por el plazo de dos años con el fin de que sus compradores no solo tengan una vista privilegiada de los partidos, sino que también los puedan utilizar en conciertos, o bien arrendarlos a otros usuarios.
Según informa el club a través de su página web, estos palcos le permitirán a los usuarios tener accesibilidad previa a los eventos y permanencia posterior a estos, la celebración de reuniones y actividades de negocios con un personal para una atención preferente que incluye el servicio de catering de alimentos y bebidas.
Quienes estén interesado en adquirir alguno de los pocos espacios que quedan disponibles, su precio, en el caso de los palcos que estarán ubicados en la tribuna Alberto Fouillioux, van desde las 616 UF hasta las 1.080 UF anuales más IVA. Por otro lado, las suites que se construirán en el sector Sergio Livingstone parten en las 1.102 UF hasta los 1.490 UF anuales más IVA.
