Por: Cristián Armas Morel, emprendedor inmobiliario y Entrepreneur & Real Estate Developer.
Hoy, que estamos frente a una oportunidad histórica con la entrada en vigor de la Ley N° 21.718, que rige sobre la tan esperada agilización de permisos de construcción y la reciente aprobación de la Ley N° 21.759, sobre el Marco de Autorizaciones Sectoriales, Chile está dando un salto estructural hacia un modelo legal más ágil, justo y moderno.
Por esto, por primera vez el país cuenta con una arquitectura normativa capaz de destrabar la permisología y acelerar la inversión, volviendo a reducir el déficit como lo hizo durante más de dos décadas. Es mas, si acelera permisos, amplía el subsidio a la tasa y construye con mayor rapidez, podría superar a España.
La Ley 21.759 moderniza más de 380 permisos y coordina 37 organismos públicos. Gracias a mecanismos como declaraciones juradas, tramitación paralela, plazos máximos obligatorios y trazabilidad digital, los tiempos de aprobación podrían reducirse significativamente.
Actualmente construir en Santiago cuesta 29,5 UF/m², menos que en Madrid (31,0 UF/m²). Sin embargo, el acceso sigue siendo más difícil en Chile. El PIB per cápita proyectado para 2025 es de 850 UF frente a 900 UF en España, lo que se traduce en una capacidad de compra de 11,3 m² por año en Chile, versus 12,0 m² en España.
El índice PIR lo confirma: en Chile se requieren más de 7,5 años de ingreso promedio para comprar una vivienda, mientras que en España se necesitan 6,3. Con una prórroga por 10 años de la Ley N° 21.748, Nortmativa que establece subsidio a la tasa de interés hipotecaria, las familias chilenas podrán acceder a créditos más baratos en forma permanente.
Chile necesita 750.000 viviendas y España, 600.000. Ajustado por población, el déficit chileno es tres veces más grave. Entre 1990 y 2015, Chile logró reducir sostenidamente su déficit habitacional, construyendo más de 2 millones de viviendas. Desde entonces, el déficit ha vuelto a crecer. España ya recorrió este camino. Con el Real Decreto-ley 8/2023, logró reducir sus plazos de licencias de obra mayor a solo 2 a 4 meses.
Es clave no seguir aumentando los costos laborales, ni elevar la carga tributaria. Y es de extrema urgencia derogar la ley que suprime el Crédito Especial para Empresas Constructoras (CEEC), que comenzó a ser eliminado este año y desaparecerá completamente el 1 de enero de 2027, según la Ley N° 21.420.
