Se trata de la firma nacional SIRVE, es una empresa líder en el desarrollo y transferencia tecnológica en las áreas de aislamiento sísmico y disipación de energía. Desde su creación ha participado en la mayoría de los proyectos de protección sísmica introducidos en Chile.
Por: Renato Herrera Lagos
La ingeniería estructural es el eje central de la actividad constructora a nivel global y Chile cuenta con una empresa que entre sus principales actividades, conocimientos y experiencia de su plana profesional, ofrece soluciones para todo tipo de proyectos en diversas áreas de servicios. Esta empresa se ha posicionado en diferentes países y su nombre es SIRVE, por sus siglas en inglés “Seismic Protection Technologies”. Conversamos con el gerente general, Ignacio Vial y Jorge Rivas, ingeniero de proyectos.
Sirve nace desde la mira de dos importantes profesores de la Universidad Católica, fundada el año 2003 por los ingenieros Carl Lüders y Juan Carlos de La Llera, quienes deciden generar una transferencia de tecnología desde la academia hacia la industria. La idea de ese emprendimiento se relaciona con desarrollar nuevas tecnologías de protección sísmica aplicada a la realidad chilena y de la región.
Desde la perspectiva de la construcción, han tenido importantes participaciones en obras en diferentes partes de Sudamérica y una de las más importantes se desarrolla con la participación que tuvieron en el proyecto del Aeropuerto Jorge Chávez en Lima, Perú.
Para Jorge Rivas, ingeniero de proyecto en la firma, la cotización positiva de la ingeniería nacional llevada a proyectos de la región se relaciona directamente con “la experiencia que tiene la empresa respecto al diseño de edificaciones más complejas que usan soluciones no tradicionales como la disipación de energía, control de daños en este tipo de contracciones”.
Por su lado, Ignacio Vial, gerente general de Sirve señala que nuestro país tiene dos ejes principales que lo transforman en un atractivo de la región en materia de ingeniería constructiva: “Chile es como un laboratorio natural de temas sísmicos . Hemos sufrido terremotos importantes en los últimos años lo que nos ha servido para ir probando la ingeniería, los edificios, la construcción y que nos ha llevado a seguir aprendiendo y corregir”.
Sobre el mismo tema, Jorge Rivas señala que en este tipo de empresas “la experiencia real de la profesión en Chile tiene un valor bastante único”, sentencia. Ambos ejecutivos señalan que la calidad de los profesionales chilenos en materia de ingeniería están al más alto nivel, por lo que se ha generado una comunidad en torno a la ingeniería estructural profesional bastante potente y reconocida a nivel internacional.
Sobre los países que miran a la Ingeniería chilena, Sirve ha participado en importantes proyectos en la región como Perú, Colombia, Ecuador, teniendo acercamientos con varios países de centroamérica y en otros de Europa como Nueva Zelanda. “La experiencia teórico práctica hace que exista un valor agregado importante en la Ingeniería chilena cuando se incorporan elementos tecnológicos, lo hacen una propuesta atractiva para incorporar en las realidades de otros país” afirman desde la empresa.
ha sido un trabajo bien intenso ya que es un proceso tipo fast track, es decir, se va diseñando y construyendo en paralelo
En cuanto a la construcción del nuevo aeropuerto de Lima, se tuvo que trabajar varios tópicos, desde la conectividad hasta la tecnología asociada. Desde la mirada de la empresa chilena y que se encuentra importando desarrollo tecnológico, Simple se involucra gracias a primeros contactos con Lap que es la empresa concesionaria a cargo del aeropuerto, cuando estudian la ampliación del nuevo terminal. “nos contactaron para poder revisar algunos procesos de diseño que se habían realizado anteriormente para el nuevo terminal del aeropuerto de Lima”, señala Vial.
Luego, se propone a la empresa desarrollar un proyecto donde se incorporen sistemas de protecciones, en especial, el sistema de aislamiento sísmico. Con ellos se hicieron las diferentes intervenciones proponiendo la alternativa que incorpore estas nuevas tecnologías de protección sísmica. Así, LAP unos meses después, licita el diseño y construcción de detalle del nuevo terminal Jorge Chávez que se estaba construyendo en el mismo aeropuerto y da la opción de proponer un diseño de construcción con aislamiento sísmico.
“Nosotros participamos en uno de los consocio y afortunadamente participa como en el que fue adjudicatario de la licitación y en dicho consorcio se hizo una propuesta incluyendo el aislamiento sísmico, hemos estado participando desde inicio del 2021 en ese acompañamiento de este nuevo aeropuerto con tecnologías en protección sísmica”, señala Vial.
El ingeniero de proyectos Jorge Rivas destaca que “ha sido un trabajo bien intenso ya que es un proceso tipo fast track, es decir, se va diseñando y construyendo en paralelo. Ya se comenzó con ciertas fases de la construcción y existen otras que están por empezar en los próximos meses. Lo interesante es que el Jorge Chávez será uno de los pocos que tendrá estos sistemas de aislación sísmica y será en los próximos años uno de los terminales más grandes en la región, sobrepasando incluso al de Sao Paulo”.
La mirada de la empresa desde la perspectiva de enfocar cada proyecto donde existe una complejidad mayor en la región, ligada a movimientos sísmicos que no se encuentran en otros país, es siempre un gran desafió que recae en la ingeniería chilena y en especial en los profesionales de Simple, como empresa que busca una mirada a largo plazo.
Al respecto Vial señala que “las autoridades de Perú han tomado este punto y saben que esta estructura es esencial y conveniente para que se pueda desarrollar una infraestructura de estos eventos naturales. Eso ha sido un punto positivamente acogido en este nuevo proyecto de Perú y no fue tomado en el aeropuerto de Chile, donde encontramos una estructura convencional”.
La realidad es que estas tecnologías eventualmente generan un costo adicional. Sin embargo, cuando esos costos se incorporan en la vida útil de un edificio y a los riesgos que se consideran asociado a reparación, y reconstrucción por daños de posibles sismos futuros, hacen que finalmente este costo adicional al inicial se justifique. “Cuando se incorpora la visión de largo plazo y tomas la ventana de tiempo completa de la vida útil del edificio esto pasa de ser un costo adicional a un ahorro para el proyecto. No se tomaron en consideración esas ventana de vida útil del edificio”,mencionan desde la empresa.
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