Este nuevo esquema busca diversificar las opciones para los inversionistas y fomentar el emprendimiento en el país.
Por: Tomás Rodríguez Botto
El Gobierno de Grecia ha lanzado una innovadora modalidad de inversión para acceder a la Golden Visa, el documento que permite a extranjeros fuera de la Unión Europea obtener un permiso de residencia mediante inversión.
A partir del 1 de enero de 2025, los interesados podrán optar por una inversión en startups con un monto mínimo de 250.000 euros. Según explicó Caterina Utili, Gerente General de AIM Global, “la inversión debe realizarse en empresas registradas en el Registro Nacional de Startups griego. Este modelo otorgará al inversionista un permiso de residencia por cinco años”.
Además de la inversión inicial, las startups deberán cumplir con el requisito de crear al menos dos puestos de trabajo durante el primer año. “La idea principal es transformar el modelo productivo griego hacia uno basado en productos innovadores y de alto valor agregado”, añadió Utili.
Esta nueva alternativa presenta una opción más accesible frente a las tradicionales inversiones inmobiliarias que suelen requerir montos más altos, alineándose con la estrategia del gobierno griego de atraer capital hacia sectores de tecnología y emprendimiento.
Grecia no es el único país en Europa que utiliza este enfoque para fomentar la inversión extranjera. Portugal ya ofrece un modelo similar para acceder a su Golden Visa, con un monto mínimo de inversión de 350.000 euros en startups. En este caso, las empresas deben presentar un proyecto innovador y demostrar la creación de empleos como parte de los requisitos.
El esquema portugués, al igual que el griego, permite que el solicitante y su familia obtengan la residencia, consolidándose como una opción atractiva para emprendedores y familias aceptadas en establecerse en Europa.
Con esta iniciativa, Grecia espera fortalecer su ecosistema de startups y atraer a inversores interesados en proyectos tecnológicos y de alto impacto. A medida que el modelo evolucione, podría convertirse en un referente para otros países europeos que busquen diversificar sus mecanismos de atracción de capital extranjero.