El auge de los hogares unipersonales en los últimos cinco años influiría en esta tendencia de inversión.
Por: Tomás Rodríguez Botto
En medio de un escenario de inversión inmobiliario, los expertos del rubro transmiten señales positivas para invertir en viviendas para el arriendo. En Chile el número de arrendatarios ha pasado de un 16,8% en el año 2006 a un 26,5% en 2022, sumado a que a partir del año 2017 ha existido una aceleración del número de hogares que demandan una vivienda, lo cual impulsa al mercado inversionista.
Ante ese panorama, Allen Montenegro, jefe del Área de Estudios de BMI Servicios Inmobiliarios, señaló que “para aquellos que tienen la posibilidad de invertir en viviendas, ya sea por ser sujetos de créditos o por contar con las condiciones necesarias para concretar una compra de este tipo, claramente este es un excelente momento para hacerlo”.
“Lo anterior debido a que las actuales dificultades de acceso al financiamiento para una gran parte de la población han impulsado la demanda por arriendos por lo que representa una oportunidad para quienes tienen la capacidad de invertir, asegurando una alta ocupación y un flujo constante de ingresos”, agregó Montenegro.
También hay que considerar ciertos factores que han mermado el acceso a la vivienda, como lo es el ingreso mínimo, por ejemplo para acceder a una vivienda de 4.000UF en el año 2021 se requería un ingreso de $2.311.161, mientras que para este año se necesita $2.918.425.
En tanto, Maximiliano Vega, cofundador de Depa ya!, comentó que “siempre es un buen momento para invertir en propiedades, hoy en un escenario deprimido de ventas (-12% comparado con el primer semestre de 2023) a pesar de ello los precios se han mantenido estables. El stock de viviendas ha ido a la baja ya no existen los 40 meses para agotar stock que existía, si no que estamos en 30”.
Por su parte, la rentabilidad del mercado de arriendo en la Región Metropolitana se encuentra por sobre el 4,5% en promedio, según datos de TocToc. Donde hay comunas que presentan sobre el 5% de rentabilidad tales como: Estación Central, San Miguel, La Cisterna, San Joaquín, Maipú y Huechuraba.