“Promovemos estas respuestas inmediatas frente a una política habitacional históricamente centrada en la entrega de viviendas en propiedad”, señaló Javiera Moncada, directora del centro de estudios de TECHO-Chile.
Por: Tomás Rodríguez Botto
Con el año 2025 en curso, la crisis habitacional del país sigue agravando su situación con cerca de 114 mil familias que viven en asentamientos informales y más de un millón de hogares que necesitan ayuda del Estado. En esa línea es que TECHO-Chile junto a Déficit Cero presentaron un programa que contiene soluciones habitacionales transitorias para combatir el déficit habitacional del país.
Dentro de las medidas destacan la implementación de barrios transitorios, que busca la construcción de estos barrios que permitan la rotación temporal de familias, garantizando el acceso continuo a nuevos beneficiarios. Además de saneamiento y regularización de loteos y subsidios al arriendo.
Sumado a que ambas organizaciones recomiendan ampliar el perfil de usuarios de alojamientos colectivos temporales, para incluir a solicitantes de asilo, víctimas de violencia intrafamiliar (vif), jóvenes vulnerables, personas migrantes con necesidad de vivienda y familias expuestas a desalojos forzosos.
En ese sentido, Javiera Moncada, directora del centro de estudios de TECHO-Chile, explicó que “para que estas soluciones sean efectivamente transitorias se requiere de un plan integral que además de la construcción de viviendas, acompañe a las familias a través de programas de acompañamiento social, como formación laboral, educación financiera y asistencia legal para apoyar los esfuerzos de los vecinos en mejorar su situación a largo plazo”.
En tanto, Trinidad Vidal, directora de Políticas Públicas de Déficit Cero, comentó que “es urgente diversificar las respuestas a la crisis habitacional; las soluciones transitorias no solo ofrecen refugio inmediato, sino que permiten avanzar hacia una estabilidad habitacional efectiva y sostenible”.