El rascacielos que cuenta con 49 pisos, Quay Quarter Town ubicado en Sidney, fue nombrado edificio mundial del 2022.
Construido originalmente como el Centro AMP en la década del 1970, la estructura del edificio estaba llegando a su fin, ante lo cual, se decidió construir una nueva torre pero sin demoler la que ya estaba.
Es a finales del año pasado que se inauguró Quay Quarter Town, un rascacielos que se construyó sobre el edificio que ya se encontraba donde se conservó dos tercios de la estructura antigua, incluidos las vigas y columnas, además del 95% del núcleo del edificio original. Esta nueva torre se ha transformado en icónica gracias a su importante aporte en lo medioambiental, como fue el ahorro de 12 mil toneladas de CO2.
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El proceso de construcción fue retirar las partes que no se pueden reutilizar del edificio antiguo, por lo que se erigió una nueva estructura al lado de lo que ya estaba. Además una fachada de vidrio envolvió ambas estructuras para convertirlas en solo una y crear el rascacielos, y se dejó un espacio de 4 metros entre las estructuras nuevas y antiguas hasta la última etapa de construcción, para darle un tiempo al concreto para que se asiente.
También se aumentó al doble la superficie disponible del edificio, lo que significó un crecimiento de personas que puede albergar el edificio, donde se pasó de 4.500 a 9.000.
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Otro de los beneficios que tuvo la construcción de este edificio reciclado fue que el diseño optimiza la energía incorporada y los recursos inherentes al edificio existente y da como resultado un ahorro de 12.079 toneladas métricas de carbono incorporado, además de reducir el tiempo de construcción y el impacto ambiental.
Entre las características del edificio se encuentran modernos edificios de oficinas, cuatro terrazas ajardinadas dentro de la torre que promueven la salud y el bienestar, así como también se encuentran salas de reuniones informales, un estudio de yoga y un espacio para eventos. Y, en cuanto a la tecnología, incluye sistemas inteligentes inalámbricos e integrados a nivel empresarial.
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El proyecto consideró una inversión de USD 670 millones y presenta cinco volúmenes ampliados que giran hacia el cielo. Kim Herforth Nielsen, Directora Creativa de 3XN Architects, señaló que “al dividir el edificio en cinco volúmenes separados y colocar un atrio y una terraza en la base de cada uno, las columnas se convierten en entornos sociales más pequeños e íntimos, lo que facilita que los empleados se conecten e interactúen entre sí”.
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