El hombre fuerte de Twitter y Tesla construirá un barrio para sus trabajadores en Austin, Texas. El futuro barrio estará ubicado a un kilómetro de The Boring Company.
Por: Renato Herrera Lagos
Una buena noticia es la que tienen los trabajadores de Elon Musk y que trabajan en The Coring Company, pues el multimillonarios, tras incursionar en el negocio de los autos eléctricos, negocio espacial y recientemente comprar Twitter en octubre por US$ 44.000 millones, busca desarrollar proyectos inmobiliarios, asociándose con Lennar, uno de lo más grandes en proyectos inmobiliarios en Estados Unidos.
La idea del revolucionario empresario es construir 110 viviendas en un vecindario cercano en Austin, Texas para sus trabajadores, quienes desarrollan actividad en la compañía dedicada a la excavación de túneles, y cercana a la fábrica Space X. La información la confirmó The Real Deal, medio especializado en el sector inmobiliario en el país del norte.
Sector concentrado en las operaciones del magnate tecnológico, pues ahí se encuentran la fábrica gigafábrica de Tesla, inaugurada en abril de 2022, tras una inversión de US$ 1.100 millones, donde además está previsto comenzar la producir de la camioneta eléctrica Cybertruck, el robot humanoide Optimus y los taxis robot de la compañía.
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El desarrollo urbanístico, bautizado como “Project Amazing” o Proyecto asombroso en español, contará con vecinos que vivirán en sectores bautizados con nombres de las técnicas que se utilizan para construir los subterráneos o los autos. Se sabe que irán destinadas a la fuerza laboral del gigante tecnológico porque así lo ha confirmado el comisionado del condado de Bastrop, Mel Hamner, encargado de dar el visto bueno al plan.
“The Boring Company está trabajando con Lennar para construir esta subdivisión de viviendas para apoyar a los trabajadores”, confirmó la semana pasada. Un área en crecimiento A medida que Musk ha ido trasladando parte de su imperio desde Silicon Valley (California) a Texas para aprovecharse de los incentivos fiscales, se ha acelerado el crecimiento de la población y las necesidades de vivienda en el área central del estado.
Musk ha asegurado que solo la gigafábrica de Tesla podría llegar a emplear a 20.000 personas y acaba de confirmar que tiene previsto ampliarla. Por el momento, ya cuenta con 5.000 trabajadores, lo que le convierte en el segundo empleador del estado por detrás del gigante tecnológico dirigido por Tim Cook, que aspira a atraer a 15.000 empleados.
Es posible que las casas sean construidas en 3D como la comunidad Wolf Ranch que Lennar está levantando en la localidad texana de Georgetown. Aunque Musk tiene otra idea. Ya ha hablado en alguna ocasión sobre la posibilidad de utilizar la tierra y la piedra extraídas de las perforaciones de sus túneles para reciclarlas en ladrillos entrelazados como unas piezas de Lego a tamaño real.
El barrio se construirá en un área de 24 hectáreas cerca del río Colorado, dominada mayormente por agricultores, pero con un proceso de urbanización acelerado. El proyecto inicial incluía 211 casas desarrolladas en dos fases de desarrollo . Al final, se ha quedado en menos de la mitad.
Sus ingresos han aumentado un 50% en los últimos dos años hasta los US $32.000 millones. Si bien Lennar y Musk nunca han trabajado juntos, la firma constructora ya participó en la ronda de recaudación de fondos más reciente de The Boring Company con cinco millones de dólares junto con otras empresas como Brookfield, Tishman Speyer y Dacra. Esto indica que el sector inmobiliario está interesado en asociarse con el inventor sudafricano.
Esta jugada, interpretada por los expertos como un golpe maestro para adelantarse a una futura bajada de las tasas de interés que hará que retornen los compradores, tras el desplome histórico de las ventas de viviendas en 2022. Una tendencia que se ha notado retraída en Austin.
El precio medio de la vivienda alcanzó un máximo histórico de US $550.000 entre abril y mayo del año pasado debido a la alta demanda. Desde entonces, comenzó a bajar y, para este año, se prevén caídas de más del 25%, según Goldman Sachs. La nueva aventura de Musk aparece tras la caída del precio de las acciones de Tesla en un 65% en 2022 por las preocupaciones de los inversores sobre la gestión de Twitter y el aumento de la competencia.
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