Por: Eduardo Ricci Burgos, Abogado de Negocios.
La construcción modular se está consolidando como una tendencia clave en el sector de la construcción, con un impacto relevante en el negocio inmobiliario, ofreciendo una alternativa más eficiente, rápida y sostenible, en comparación con los métodos de construcción tradicionales.
Este enfoque se basa en la creación de módulos prefabricados, los cuales se transportan al sitio de construcción y se ensamblan para formar edificaciones completas, transformando el sector, especialmente, en respuesta a la creciente demanda de viviendas y a la necesidad de reducir el impacto ambiental de la construcción, reduciendo costos y tiempos de ejecución.
Efectivamente, uno de los principales beneficios de la construcción modular es su rapidez. Al realizar gran parte del trabajo en un entorno controlado como una fábrica, los proyectos pueden completarse entre un 30% y 50% más rápido que con los métodos convencionales, dada la fabricación de los módulos que puede realizarse simultáneamente con las preparaciones en el terreno, reduciendo significativamente los tiempos de construcción.
A todo lo demás, se suma que la construcción modular no se ve tan afectada por condiciones climáticas adversas, por lo que asegura mayor previsibilidad y cumplimiento en los plazos de entrega.
La eficiencia y reducción de costos es otro atractivo clave de la construcción modular, ya que al estandarizar los procesos de producción y optimizar los materiales, se minimizan los desperdicios y se controlan mejor los costos. La posibilidad de repetir diseños modulares también permite economías de escala, especialmente en proyectos de gran envergadura como viviendas sociales, hospitales o colegios.
En materia de sostenibilidad, esta construcción modular ofrece importantes ventajas, pues al realizarse la mayor parte de la construcción en fábricas, se reduce el impacto ambiental en el sitio de obra, como la generación de residuos, la contaminación acústica y muchos de los materiales utilizados en la construcción modular que son reciclables o reutilizables, contribuyendo a una economía circular en el sector.
En diseño y flexibilidad, así como los módulos prefabricados, pueden adaptarse a una amplia variedad de estilos arquitectónicos y necesidades, por lo que la construcción modular puede aplicarse en diferentes tipologías de edificaciones, manteniendo altos estándares de calidad y cumpliendo con la normativa, representando una solución innovadora para enfrentar los desafíos actuales del sector inmobiliario.
Al combinar velocidad, sostenibilidad y eficiencia, esta metodología está marcando el camino hacia el futuro de la construcción, respondiendo a la demanda creciente de viviendas y edificaciones comerciales, en un mundo cada vez más urbanizado y preocupado por el medio ambiente.
