La venta de derechos en zonas silvoagropecuarios ha generado una serie de consecuencias: sobrepoblación, problemas legales y falta de servicios básicos, son algunas que han dejado la venta de los loteos iregulares o también conocidos como brujos.
En la zona rural de la comuna de Papudo se ubican dos zonas denominadas El Tome y El Romeral, lugares que de acuerdo con el Plan Regulador Comunal, están destinadas a zona agrícola o silvoagropecuario, en las cuales se permite la venta de una hectárea con la construcción de dos viviendas según la Ley General de Urbanismo y Construcciones (LGUC). Sin embargo, se están vendiendo terrenos con subdivisiones menores a lo establecido.
La situación ha generado que los lugareños queden desabastecidos en servicios básicos como lo es el agua o la luz, ya que los mismos que venden los terrenos son quienes ofrecen este tipo de suministros a un precio no regulado por el mercado.
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“Han ido creciendo de manera exponencial, porque acá hay un grupo de loteadores inmobiliarios que han hecho de esto un negocio que se terminó convirtiendo en mafias y se han apoderado de estos sectores”, asegura la autoridad de Papudo, Claudia Adasme.
La venta de loteos irregulares ha generado que el municipio no cuente con la capacidad operacional necesaria para sustentar servicios de salud, transporte y educación. En el sector de El Tome, existen más de tres mil viviendas y en El Romeral más de mil, lo que no está incluido en el último censo que contempla la población de Papudo y que data de 7 mil habitantes, e incluso podría estar superando los 12 mil.
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A causa de esta situación, la edil señala, “nosotros no queremos más loteos irregulares y los que ya están, nos tenemos que hacer cargo”.
Es por esto que se han realizado distintas instancias legales y de fiscalización, con el objetivo de detener las nuevas obras en conjunto con el Minvu, el SAG y CONAF.
...Porque acá hay un grupo de loteadores inmobiliarios que han hecho de esto un negocio.
El abogado inmobiliario, Francisco Uribe, comenta sobre la principal diferencia entre las dos modalidades en las que se están vendiendo los terrenos. La primera es el derecho de tierra que no es heredable y solo se cuenta con una posesión para construir en el terreno de manera no regularizada. La otra, es a través de sociedades por acciones en las que cada persona tiene un porcentaje del terreno donde no se específica cuál parte es, ya que tampoco puede tener un número de rol propio.
Los loteos irregulares no cuentan con las regularizaciones legales, ya que, “cuando están estos loteos, llega gente inescrupulosa y te van a mostrar un plano que es un croquis que hizo un arquitecto x y que nunca pasó por el conservador de bienes raíces. Están actuando fuera de la ley completamente”, asegura el abogado. Las normas por las cuales deberían controlarse estas adquisiciones son la Ley Nº 3.516 que regula la subdivisión de predios y la Ley Nº 55 de la LGUC.
La máxima autoridad municipal se encuentra realizando todas las gestiones legales, para enfrentar a los que venden loteos de manera irregular y, además, se está buscando trabajar en conjunto con el MINVU, respecto a la entrega de viviendas por subsidios que en la comuna no se entregan desde el año 2004 en la comuna, lo que ha potenciado la demanda a este tipo de negocios ilícitos.
Al igual que en Papudo, la Región de Antofagasta se ha visto enfrentada a la problemática de la venta de loteos irregulares, los cuales en muchas ocasiones provienen directamente de tomas o campamentos. Sin embargo, la venta de terrenos destinados al uso agrícola ha afectado al sector norte de Alto La Portada.
El Gobernador de la Región de Antofagasta, Ricardo Díaz, comenta que los loteos irregulares se están dando en zonas que no están consideradas en los planos reguladores de cada comuna, situación que ha generado la construcción en lugares con quebradas y zonas de riesgo.
El Gobierno Regional ha buscado distintas instancias para generar una mesa de conversaciones con las distintas entidades a cargo del tema, respecto a la forma de solucionar la escasez de vivienda y reubicar a aquellas personas que se encuentran en loteos irregulares.
Sin embargo, “todavía no existe la voluntad por lo menos, ni de Bienes Nacionales ni de SERVIU, que son las instancias que administran esto para poder ir generando este proyecto”, menciona Díaz.
La venta de derechos en la región ha conllevado una serie de consecuencias para las personas, entre ellas, el uso exclusivamente de la propiedad y no dominio, por lo que el gobernador considera esta situación como una estafa. Además, los servicios de luz y agua potable se han visto afectados por las conexiones irregulares a los suministros por parte de los campamentos.
La situación ha generado que se levanten distintas propuestas desde el Gobierno Regional, como que las personas de los campamentos cuenten con medidores propios de luz y agua, con el objetivo de tener el derecho asegurado de estos servicios. “Nosotros podemos ayudar en el tema del banco de suelos y la urbanización, que es donde tendríamos la posibilidad de ir financiando este tipo de proyectos”, afirma Díaz.
La situación para el gobernador se ve agravada por condiciones burocráticas: “mi región es tan extensa, que no sé si la capacidad de funcionarios de Bienes Nacionales, de como para poder ir haciendo estas fiscalizaciones tan necesarias”.
Finalmente la falta de soluciones habitacionales y la demora en la tramitación suman como detonantes en la masiva venta de loteos de manera irregular.
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