En el mercado inmobiliario existe mucha oferta para asesorarse antes de comprar una propiedad o hacer una inversión. Entre los que más han proliferado están los brokers inmobiliarios, pero es importante comprender quiénes son, qué tipo de propuesta pueden otorgar y qué tipo de resultados pueden asegurar.
Por: Renato Herrera Lagos
Con la inflación más alta en 28 años, buscar un negocio o inversión que nos asegure ganancias sin altos riesgos, resulta un camino natural a tomar. El negocio inmobiliario puede ser esa oportunidad. Sin embargo, la elección debe ser idealmente acompañada de un profesional o empresa que nos asesore, para lograr el objetivo que buscamos y repercuta de manera positiva en el futuro.
Es por esto que hay que comprender quiénes son los actores que intervienen en el mercado de los bienes raíces, por lo que aclarar dudas en los conceptos es un paso fundamental antes de aventurarse. Por ejemplo, existen los agentes y los broker inmobiliarios, ambos cumplen una labor puntual a la hora de asesorarnos en nuestra inversión, pero ¿en qué se diferencian y por cuál debemos decidirnos para orientarnos?.
Para Ignacio González, actual portero de Club de Deportes Antofagasta, CEO y Co-Founder de AS Inmobiliario, es primordial asesorarse con empresas que tengan prestigio en el medio y que se adapte a las necesidades de cada cliente. “Pienso que la misión del broker tiene que ver con ser un asesor, no vender por vender. Ajustarse a cada cliente respecto al presupuesto, perfil e inversión. Y digo que debe ser un asesor, pues en este rubro existen algunos beneficios que puede ser de gran ayuda para los futuros inversores”.
¿Cuál es la labor de un broker inmobiliario y cómo saber si necesito uno?
Un broker inmobiliario es el encargado de ser un intermediario que ayuda al inversionista y le facilita el proceso de negociación con la inmobiliaria. En Chile, los brokers pueden ser personas naturales o empresas y pueden negociar con distintas inmobiliarias o solo con una, para ofrecer un portafolio de propiedades y apoyar en el proceso de compra-venta.
Una vez concretada la promesa de compra-venta, los brokers cobran una comisión que en teoría debería ser pagada por las inmobiliarias. González señala que la figura del broker debería funcionar como un coaching: “nuestra manera de trabajar puede ser atípica al resto. Siempre me pongo como ejemplo. Mi experiencia cuando comencé con este tipo de inversiones fue complejo, por eso intento pasar mi propia vivencia como inversionista a los clientes. Nuestro método es transformarse en coaching y no vender por vender, sino, ajustarse a las necesidades de las personas”.
Las preguntas base que deberían surgir a quienes desean invertir, son: ¿Conozco sobre este rubro? ¿Cuento con experiencia en inversiones inmobiliarias? ¿Sé lo que implica invertir o comprar en una propiedad? ¿Necesito asesorarme? ¿Qué necesito de mi asesor? Una vez tomada la decisión de ser acompañado en el proceso, hay que buscar asesores que estén especializados y actualizados en el rubro en detalles, como por ejemplo, fijarse en si sabe cómo funciona la nueva reforma tributaria.
Por su parte, Eduardo Rodríguez, gerente general de iProyéctate, comenta que “nuestra recomendación es que siempre busquen ser asesorados, pero para aquellos que se aventuran solos, recomendamos siempre analizar el proyecto, los barrios, la macrozona, el valor del bien raíz, la inmobiliaria, la constructora, la conectividad de la propiedad y proyectar el tipo de arrendatario o vecino que quiere tener”.
En nuestro país no existe una regulación sobre la labor de los asesores, aunque se están generando instancias que buscan informar como lo es el registro oficial que será llevado por el Ministerio de Economía, donde se plasmarán las condiciones para desarrollar la labor de corretaje. Además, el proyecto establece causales de suspensión del registro y sanciones para quienes incurran en infracciones en este marco.
Para Francisco Ackermann, Co–Founder de Capitalizarme, el mercado se ha regulado de manera orgánica: “es un mercado no regulado que se ha regido solo. Existen actores que buscan hacer las cosas bien, empresas y profesionales pequeños que han ganado desde el correcto oficio, buenos números. Esto se ha ido profesionalizando principalmente en empresas marketplace, después de 8 años donde empresas sobreendeudaron a las personas, una de ellas tuvo en sus filas a un ex candidato presidencial”.
La regulación del rubro de los brokers inmobiliario debería incentivar las buenas prácticas, dejando atrás a aquellos brokers que contratan de forma masiva a “asesores inmobiliarios” con el fin de aumentar sus ventas y faltan a la ética y el profesionalismo con los clientes y sus colaboradores.
Para considerar existe en el corretaje tradicional actualmente una comisión estándar de un 2% sobre el valor de la propiedad por los servicios. Sin embargo, hay brokers que no cobran comisión cuando no completan el proceso de compra hasta la escrituración, sino que se enfocan solamente en la venta.
Eduardo Rodríguez de iProyéctate, señala que en su caso ellos realizan un cobro por la asesoría equivalente al 1% y que abarca todo el proceso de compra o inversión de sus clientes. Igualmente, indica que participan en conjunto en la toma de decisiones respecto al proyecto inmobiliario que escojan, en el proceso operativo y logístico en términos legales, en la gestión y obtención del crédito hipotecario, hasta la recepción y entrega final del inmueble. Esto ya sea en venta en blanco, verde o en entrega inmediata.
Finalmente, sobre las recomendaciones los expertos señalan que las personas deben revisar bien la empresa en la cual desean depositar su confianza, porque esto no es un negocio menor. Hoy en día, la inversión inmobiliaria es una gran opción para asegurar nuestro futuro, por lo que contar con un profesional capacitado puede traducirse en nuestra mejor estrategia.
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