Por: Jorge Araos, Director de Oficinas JLL Chile.
En el dinámico mercado actual, la revitalización de los espacios de trabajo, especialmente en el sector de oficinas corporativas, se ha vuelto un imperativo. Los proyectos que no integran elementos sostenibles y tecnologías avanzadas están perdiendo rápidamente su valorización en el mercado. De hecho, se estima que para el año 2030, el 65% de los edificios a nivel mundial que no se actualicen quedarán obsoletos. Esta no es una preferencia, es una demanda clara del mercado.
La incorporación de elementos sustentables en la construcción, terminaciones y operación de un edificio puede aumentar su calidad y valor en el mercado entre un 5% y un 17%. Cualquier empresa, desarrollador o inversionista busca este tipo de crecimiento, y hoy en día, este se logra, en gran medida, a través de factores de sustentabilidad.
Sin embargo, no basta solo con construir de manera sostenible; la verdadera clave reside en la administración de estos espacios a largo plazo. Aquí es donde la inteligencia artificial juega un papel transformador. La IA ha avanzado a pasos agigantados y su implementación en los edificios para medir y ejecutar tareas, es enorme.
Un edificio que utiliza esta tecnología para su operación diaria puede optimizar sus tareas hasta en un 70%. Esto significa, pasar de encuestas de satisfacción trimestrales a empleados para evaluar la calidad del aire o la iluminación, a una medición instantánea que entrega datos precisos al dueño, al administrador y a todos los involucrados, permitiendo una toma de decisiones inmediata.
La inteligencia artificial contribuye significativamente en que los espacios de trabajo sean más agradables para el ser humano. Esto, a su vez, impacta directamente en el rendimiento. Por ejemplo, la productividad de una persona trabajando en un ambiente que propicie la sustentabilidad puede aumentar entre un 0.5% y un 5% en su jornada.
La IA permite que los sistemas de los edificios se midan constantemente, facilitando decisiones y acciones mucho más rápidas frente a cualquier dato que arroje resultados, sin tener que esperar años para realizar cambios significativos. En esencia, la inteligencia artificial es una herramienta tan importante o incluso más, que los elementos de sustentabilidad, ya que nos proporciona información precisa y en tiempo real, para llevar la construcción y a los edificios al siguiente nivel.
Diversos informes demuestran que los edificios que invierten capital en elementos sostenibles para mejorar la calidad de vida de sus ocupantes no solo aumentan su valorización en el mercado, sino que también atraen entre un 8% y un 35% a mejores usuarios o arrendatarios, y aumentan sus rentas entre un 9% y un 18%. Los propietarios están dispuestos a desarrollar edificios con certificaciones de eficiencia energética porque esto mejora directamente su rentabilidad.
El mercado cada vez es más exigente en esta área y esto se refleja en que ya no es una tendencia local de Chile, sino global. Desarrollar un edificio que cuente con elementos básicos de sustentabilidad, como un muro cortina de alta calidad, sistemas de renovación de aire sustentable, paneles acústicos y paneles verdes, no solo mejoran la calidad de vida de los ocupantes, sino que también benefician directamente al proyecto.
