Si el vendedor acepta la transacción, la compañía se hace cargo del proceso de desalojo. ¿Es un bueno negocio?
Por Leonardo Núñez
La crisis por el acceso a la vivienda que atraviesa España incluso ha convertido en una oportunidad de negocios las propiedades tomadas ilegalmente. Es lo que, al menos, estima la empresa inmobiliaria Bafre.
Como parte de su estrategia de crecimiento para aumentar su presencia en el mercado, la firma lanzó una oferta especial para comprar propiedades “okupadas”. Según la propuesta, los dueños de inmuebles que se encuentren en esta situación podrán contactarla para que ésta estudie, analice y valore la situación de la propiedad.
“Una vez evaluada, la empresa inmobiliaria le propondrá una cuantía al propietario, quien podrá vender la vivienda, aún con los okupas en su interior”, señala la oferta.
Una vez transferido el inmueble, Bafre se encargará de su recuperación y de la expulsión de los “okupas”, como se define en España a las personas que incurren en esta práctica de usurpación.
Frente a las inquietudes que ha generado la propuesta, Bafre indicó que cumplirá con todas la normativas legales y sociales para la salida de los moradores. Además, señaló que esta estrategia de negocios busca dar una “solución integral para propietarios en apuros”, a la vez que la permitirá “expandir sus carteras de activos a largo plazo”.
La falta de oferta de viviendas a un precio asequible en las principales ciudades de España, por el auge del turismo y el encarecimiento de las propiedades, entre otros motivos, ha generado un alto déficit habitacional.
Según los datos del último Eurobarómetro, el 35% de los españoles identifican la vivienda como su principal problema, con un aumento de 18 puntos con respecto a la anterior medición. A nivel del conjunto de la Unión Europea, solo el 13% menciona la vivienda como el principal problema.
