Este modelo de inversión inmobiliario también tiene demanda en Chile.
Por Leonardo Núñez
La famosa actriz Meg Ryan, ícono de las comedias románticas de los años ‘90, ha vuelto a captar la atención del mundo inmobiliario tras poner a la venta su mansión en Montecito, California por US$19,5 millones.
Lo llamativo del caso no es sólo la lujosa propiedad en sí, sino el aumento de valor logrado por la actriz gracias a una extensa remodelación, que más que triplicó el precio original de compra de US$5,05 millones en 2021.
La casa, construida originalmente en 2010, contaba con cinco dormitorios, cinco baños y una casa de huéspedes. Tras una intervención completa dirigida por Ryan, la mansión ahora incluye siete dormitorios, seis baños, una ampliación de 600 m² a 840 m² de superficie habitable, tres chimeneas interiores, una cabaña de madera y jardines renovados que reflejan el estilo de vida cálido y relajado del sur de California.
Ryan, quien también es conocida por sus inversiones inmobiliarias enfocadas en la compra, remodelación y revalorización de propiedades de lujo, puso inicialmente la propiedad a la venta por US$22,5 millones en febrero de 2024, antes de ajustar su valor al actual precio de venta. Aunque aún no ha concretado la venta, el margen de ganancia proyectado es considerable.
Un modelo de inversión también presente en Chile
El caso de Meg Ryan refleja una tendencia internacional que también tiene un público objetivo en países como Chile: la remodelación como estrategia de valorización inmobiliaria.
En un contexto donde los precios de las viviendas nuevas han aumentado sostenidamente, y la oferta en el mercado primario se ve limitada por el bajo dinamismo del sector construcción, cada vez más familias chilenas optan por renovar o ampliar sus viviendas existentes como una forma de mejorar su calidad de vida y, a la vez, revalorizar sus propiedades.
Según datos del Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu), las solicitudes de permisos de edificación para ampliaciones y remodelaciones crecieron un 14% entre 2022 y 2024, especialmente en comunas del Gran Santiago como Ñuñoa, La Reina y Maipú. En regiones, ciudades como Concepción, Viña del Mar y Temuco también muestran un alza en este tipo de proyectos residenciales.
¿Por qué remodelar?
Entre las razones que explican esta tendencia están: Aumento del valor del suelo urbano, que dificulta el acceso a viviendas nuevas en zonas consolidadas; mayor flexibilidad financiera: remodelar permite intervenir por etapas, ajustando el presupuesto; cambio en las dinámicas familiares: muchas viviendas son adaptadas para acoger a varios núcleos familiares o incluir espacios de teletrabajo; incentivos públicos: el Minvu cuenta con programas de subsidios para mejorar y ampliar viviendas, como el DS255 y el DS27, dirigidos a sectores medios y vulnerables.
Además, el auge del diseño y la arquitectura de interiores en redes sociales ha estimulado el interés de las personas por personalizar sus espacios, replicando estilos internacionales como el “mid-century modern”, el escandinavo o el “rustic chic”, similar al que Ryan incorporó en su mansión californiana.
Al igual que Meg Ryan, algunos inversionistas inmobiliarios en Chile están viendo oportunidades en la compra de propiedades deterioradas para su posterior refacción y venta. Aunque el mercado chileno no tiene aún la escala del “house flipping” de Estados Unidos, plataformas como Portalinmobiliario y Yapo.cl muestran un aumento de publicaciones de casas remodeladas en sectores emergentes de Santiago y regiones.