Por: Sergio Cadenasso, CEO de Cadeco.
Al ir finalizando el primer semestre del 2024, hemos visto cómo los vaticinios en el sector de la construcción se cumplen y el futuro sigue siendo incierto, considerando que las últimas estimaciones de la CChC señalan que la inversión sectorial caerá 1,3% durante este año.
El precio de los materiales ha tenido una importante alza, por lo que la cadena completa de suministros se ve afectada, estamos ante una “caída libre” y es mucho más profunda de lo que se puede observar a simple vista, ya que este derrumbe involucra y afecta a los proveedores de materiales y servicios de la construcción, generando un daño tremendo a sus dos mercados objetivos.
Las constructoras arrastran a los abastecedores en las quiebras declaradas y el negocio de la subdistribución, empresas que han apostado a este nicho, ya que de esta forma se evitan problemas con el crédito y la cobranza.
Tenemos un gran desafío, partiendo por el de atrevernos a innovar con nuevas estrategias que minimicen las restricciones de la banca en el otorgamiento de créditos y las altas tasas de interés, respetar los acuerdos pactados, pagar en tiempo y forma, no cometer abusos cuando se tiene mejor poder de compra, así como, trabajar como gremio de la construcción en conjunto con constructoras y proveedores.
Todo debe estar pensado para que logremos como sector, ser más efectivos en nuevas soluciones ante las medidas que se adoptan a nivel de Gobierno, para crear mejores escenarios que entreguen la confianza necesaria al gremio, clientes y constructoras, para que la industria sea nuevamente un buen negocio para todos.
