Las capturas del FASat Charlie permiten gestionar de mejor manera los recursos para la emergencia y entregar pistas sobre eventual intencionalidad de los focos incendiarios.
Por Leonardo Núñez
Cuando se gatilla una emergencia como la que se vive en la Región de La Araucanía y Biobío, donde aún se registran 22 incendios forestales activos, alcanzando ya zonas pobladas, son varios los organismos que trabajan en conjunto para su contención.
Por la magnitud del fuego y lo difícil de acceder a algunas zonas, hoy la tecnología satelital con la que cuenta Chile cumple un rol fundamental en estas tareas.
La Fuerza Aérea de Chile (FACh), a través del Servicio Aerofotogramétrico (SAF), ha estado proporcionando a los organismos que trabajan en tierra las imágenes satelitales que muestran, entre otros datos, la magnitud y la dirección en la cual se mueven las llamas.
Estos son un insumo clave para el Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (Senapred) y la Corporación Nacional Forestal (Conaf), ya que les permiten tomar las decisiones sobre las gestión de recursos para combatir las llamas.
Desde la Fach, explicaron que las imágenes satelitales de los sectores de Ercilla y Galvarino que se les entregaron a los organismos mencionados, corresponden a capturas del satélite FASat Charlie y a la constelación internacional de satélites pertenecientes al Sistema Nacional Satelital.
El SAF también cuenta con una aplicación que contiene un archivo histórico de imágenes de los sectores afectados. Esto permite acceder de una manera fácil, rápida e interoperable, al antes y después de las zonas afectadas. “Esta herramienta será de gran utilidad para la cuantificación de los daños, una vez que la emergencia finalice”, explicó la FACh.
La imágenes también son un fuente valiosa de información que pueden contribuir a entregar pistas sobre una eventual intencionalidad de los incendios. Por ahora, las primeras indagaciones muestran focos simultáneas y en línea recta como origen de las llamas en las zonas de Ercilla y Pailahueque.
Según informó Biobío, se “evidencia la proximidad en los horarios en que se generaron los focos, lo que permite presumir que actuaron dos personas o dos grupos”. En esa línea, la ministra del Interior, Carolina Tohá, señaló que “a veces la intencionalidad en esa zona, en especial, está ligada a causas de disputas por tierra”. Sin embargo, agregó que no hay que anticiparse a la investigación en curso.
Este tipo de geoespacial también está disponible para diversas situaciones de emergencia y catástrofes, incluyendo extravío de personas, tsunamis, terremotos, inundaciones y otros eventos críticos.