“Entorno Empresarial” y “Trayectoria en Materia de Inversión” son las dos de las siete dimensiones en que Chile obtiene la mejor posición entre los diez países latinoamericanos evaluados: México, Guatemala, Costa Rica, Panamá, República Dominicana, Colombia, Perú, Brasil, Chile y Argentina.
El nearshoring es una estrategia de negocios en la que una empresa traslada parte de sus operaciones a un país cercano o vecino con el objetivo de reducir costos, minimizar interrupciones de la operación, aprovechar las ventajas de proximidad, como menores costos de transporte, menores diferencias culturales y horarias e incluso una comunicación más efectiva.
Esta tendencia global comenzó a tomar fuerza durante la pandemia, posicionando a los países latinoamericanos como una buena opción de nearshoring debido a su cercanía con Estados Unidos.
Un informe realizado por JLL Research estudió el potencial de cada país latinoamericano, analizando diversas dimensiones de la relocalización de operaciones empresariales, ubicando a Chile entre los países mejor posicionados. El estudio llamado “Nearshoring – Develando el Potencial de América Latina” analizó a diez países latinoamericanos: México, Guatemala, Costa Rica, Panamá, República Dominicana, Colombia, Perú, Brasil, Chile y Argentina.
Las siete dimensiones o impulsoras de nearshoring evaluadas fueron: Entorno Empresarial, Trayectoria en Materia de Inversión, Fuerza Laboral, Potencial de Mercado, Infraestructura Inmobiliaria, Proximidad a Estados Unidos, Desempeño Logístico.
De las siete dimensiones evaluadas, el estudio elaboró un TOP 5, destacando a las cinco mejores en cada dimensión. Santiago de Chile destaca en el primer lugar en las categorías “Entorno Empresarial” y “Trayectoria en Materia de Inversión”. En segundo lugar en “Infraestructura Inmobiliaria”, en tercer lugar en “Desempeño Logístico” y en quinto lugar en “Fuerza Laboral”. Sin embargo, no quedó dentro del ranking en las categorías “Potencial de Mercado” y “Proximidad a Estados Unidos”.
La evaluación de “Entorno Empresarial”, una de las dos categorías en que mejor salió evaluado Chile, incluyó datos que dan cuenta de la percepción de corrupción, facilidad para hacer negocios y el riesgo país. De acuerdo a lo que indica el estudio de JLL, “Chile se destaca por brindar un escenario favorable para las empresas extranjeras. Sobresale en transparencia, tiene el riesgo crediticio más bajo de la región y ofrece servicios sencillos relacionados con procedimientos de negocios”.
Mientras que para la segunda dimensión en que mejor fue evaluado Santiago de Chile, “Trayectoria en Materia de Inversión”, JLL analizó tres variables que miden la presencia e importancia de la inversión extranjera directa medido por las cuentas nacionales de cada país.
De acuerdo al estudio, el nearshoring ofrece notables ventajas a las empresas considerando la expansión o la externalización de sus operaciones para Latinoamérica.
La primera de ellas es la rentabilidad, ya que los salarios y gastos operativos en los países de América Latina suelen ser más bajos en comparación con los mercados desarrollados.
En segundo lugar, esta práctica facilita una alineación cultural más cercana, otorgando oportunidades para el desarrollo del talento, como zonas horarias similares. Asimismo, los matices culturales conducen a una mejor colaboración y comprensión.
Se destaca además que el nearshoring permite a las empresas optimizar las cadenas de suministro, reduciendo plazos de entrega y mejoras en el servicio al cliente, al estar más cerca del mercado final.