La edificación, una obra maestra del Art Decó, fue el hogar de famosos como Cole Porter, Marilyn Monroe, Frank Sinatra y el duque y la duquesa de Windsor.
Por Leonardo Núñez
Por sus lujosas habitaciones pasaron famosos como Cole Porter, Marilyn Monroe, Frank Sinatra y el duque y la duquesa de Windsor. También los presidentes Herbert Hoover, Harry S. Truman y Dwight D. Eisenhower.
Se trata del Waldorf Astoria de Nueva York, hotel que estuvo cerrado desde 2017. Y que hoy está cada vez más cerca de reabrir sus puertas, lo que ha generado grandes expectativas. Incluso, ya se registran varias compras de habitaciones previo a su reapertura oficial en la próxima primavera de Estados Unidos.
Al edificio se le considera una obra maestra del Art Decó y se le dio la categoría de monumento histórico por la Comisión de Preservación de Monumentos en 1993. Ahora ha sido rebautizado como Waldorf Astoria New York y los residentes tendrán su propia entrada en 303 Park Avenue, un poco al norte de la entrada principal del hotel.
Las residencias originales eran habitaciones o suites de hotel por las que los ocupantes pagaban tarifas para su ocupación a largo plazo. Con la remodelación, contará con 372 unidades, que van desde los 52 metros cuadrados hasta más de 604 metros cuadrados, con 125 diseños distintos.
Los precios comienzan desde US$1.875.000 millones para estudios hasta los US$18.750.000 para cuatro habitaciones.
“Para las personas que pasan los días de semana aquí y los fines de semana en otro lugar, comprar una residencia amueblada garantiza un estilo de vida sin complicaciones”, afirmó Loretta Shanahan, directora senior de ventas.
El hotel fue vendido por US$1950 millones en 2014 por Hilton, su anterior propietario, a Anbang Insurance Group, una compañía china que cerró el edificio en 2017 para restaurarlo y renovarlo, con el objetivo de reabrirlo en cuatro años. “Pero el gobierno chino tomó el control de Anbang en 2018, envió a su presidente a prisión por fraude y creó Daija Insurance Group en 2019 para asumir el control de los activos de Anbang. Daija ahora es propietaria del hotel y las residencias”, se explica en La Nación de Argentina.