Pese a que ha causado debate por su política de vestimenta inclusiva (transgénero puedan ocupar baños de mujeres), subió su membresía, elevó montó de sus acciones y se expandió a Europa.
Por Leonardo Nuñez
En el competitivo mundo de los gimnasios, que son hoy panorama habitual en las ciudades, Planet Fitness –la cadena estadounidense de ejercicios low cost, con más de 2.400 centros repartidos en todo el país–, no deja indiferente a nadie y siempre parece estar en el centro de la controversia.
En abril de este año sus acciones caían en picada tras confirmar su política de vestimenta inclusiva, la cual permite a las personas transgénero ocupar los baños de mujeres. La áspera polémica se gatilló en uno de sus gimnasios en Fairbanks, Alaska. Allí, una usuaria de Planet Fitness, identificada como Patricia Silva, grabó y difundió sin consentimiento un vídeo de una persona que ella supuso que era trans en el vestuario femenino. Después de que esto ocurriera, el gimnasio la expulsó y se solidarizó con el colectivo trans.
Este incidente no ha sido el único. En otro gimnasio, localizado en Gastonia (Carolina del Norte), Christopher Miller fue arrestado por exhibicionismo después de entrar desnudo al vestuario de mujeres. Se justificó alegando que lo hizo porque se identificaba como mujer, aunque no existen registros previos que ratifiquen esta afirmación.
Junto con recibir amenazas de bomba en 42 de sus centros, la cadena fue castigada en la bolsa, registrando una pérdida de 400 millones de dólares, según dio cuenta Fox News. Pese a las amenazas, y en respuesta a las críticas, un portavoz de la cadena reiteró su defensa de vestuarios inclusivos. “Nuestra política de no discriminación por identidad de género permite que los miembros e invitados utilicen las instalaciones que mejor se ajusten a su identidad de género sincera y autodeclarada”, indicó.
Con el paso de las semanas, la polémica quedó atrás y Planet Fitness volvió a exhibir su solidez financiera. Alcanzó un acuerdo de acciones de recompra acelerada por US$ 280 millones con Citibank, en virtud de una negociación de 2022 que fijó en hasta 500 millones el importe recuperable.
De este modo, las partes aún se mantienen disponibles para formalizar una posible recompra de acciones de hasta 350 millones de dólares. La cadena ha aprovechado la transacción para explicar sus previsiones para la segunda parte del ejercicio 2024, cuyos objetivos pasan por que “los ingresos netos ajustados aumenten en el rango del 4% al 6%” y “que los gastos por intereses netos sean de aproximadamente 75 millones de dólares”.
Y no es todo. Confiada en su modelo de negocios, subió el precio de su membresía, elevó el monto de sus acciones y se continúa expandiendo. Entre enero y marzo, Planet Fitness abrió 25 nuevos centros a escala mundial, de los cuales 23 fueron en modelo franquiciado y los otros dos, corporativos, lo que aumentó hasta 2.599 los centros operativos de la cadena en todo el mundo. Sabadell (Barcelona) será su primera ciudad europea en el que iniciará actividades.
En cuanto a las perspectivas para el ejercicio actual, apunta a formalizar entre 140 y 150 aperturas en todo el mundo, lo que la llevaría a registrar un incremento de los ingresos de entre el 4% y el 6%.
