El Gobierno de Canadá a vetado la adquisición de propiedades s a extranjeros durante los próximos 2 años, con el objetivo de controlar los precios y beneficiar a los nacionales.
Por: Tomás Rodríguez Botto
La noticia desde Canadá respecto a que los extranjeros no residentes no podrán adquirir una vivienda durante los próximos 2 años, ha causado revuelo. Esta medida impulsada por el Gobierno de Justin Trudeau, tiene como objetivo controlar los precios del mercado inmobiliario, dado que el valor de las casas ha aumentado hasta un 44% desde el año 2021 a la fecha.
Además, el ministro de Vivienda Ahmed Hussen, aseguró que la medida también va en directo beneficio a los canadienses, ya que se espera que las propiedades sean de los nacionales como primera vivienda.
Es importante entender que el sector inmobiliario últimamente ha sufrido con la especulación por parte de los inversores extranjeros, lo que ha provocado un déficit al acceso a la vivienda y un incremento importante en los precios. Es más, Vancouver y Toronto se encuentran entre los mercados inmobiliarios más caros del mundo, llegando a costar US $764.000.
Asimismo, según datos de House Price Index, en los últimos 25 años el valor promedio de una vivienda en Canadá aumentó un 553%, siendo el país desarrollado que más elevó sus precios, luego lo sigue Australia con un 502% y Nueva Zelanda con 451%.
Esto se debe al boom de la vivienda donde el factor principal son las bajas tasas de interés, impulsada por la participación de extranjeros en el rubro. Según datos del Banco Central de Canadá, desde 2014 alrededor de un 20% de las compras inmobiliarias las hicieron inversores foráneos que no tenían intención de vivir en el país.
De esta forma, para entender lo anterior, la población extranjera no residente en Canadá en las ciudades más importantes como Vancouver y Toronto, donde cuentan con un importante mercado inmobiliario, los no residentes no superan el 6%. En cuanto a las tasas de interés, partieron en un 0,5% en 2022 y a la fecha se encuentra en un 4,25%.
Eso sí, la decisión impulsada por el Gobierno tendrá algunas excepciones en cuanto a su implementación. Por ejemplo, los estudiantes extranjeros que llevan mínimo 5 años estudiando en el país y que hayan solicitado la residencia permanente, sí podrán adquirir casas fuera de los núcleos urbanos que tengan como máximo 100 mil habitantes, así como también podrán, los solicitantes de refugio y las personas con permisos de trabajo temporales y parejas de ciudadanos canadienses.
Deja una respuesta