La Contraloría tomó razón del decreto del Ministerio de Vivienda y Urbanismo que actualiza los estándares y normas técnicas en la construcción para adecuarlos a los compromisos adquiridos por Chile en el Acuerdo de París.
Por Leonardo Nuñez
A partir de noviembre de 2025 entrará a regir una nueva norma en materia de construcciones para el mejoramiento térmico de las viviendas. Esto obligará a las empresas desarrolladoras que aún no lo han hecho, a actualizar los estándares con que levantan sus proyectos.
Los plazos ya empezaron a correr luego que la Contraloría General de la República (CGR) tomara razón del decreto N°15 del Ministerio de Vivienda y Urbanismo que fijó las nuevas exigencias.
Entre los considerandos del acto administrativo se señala que una de las principales medidas de eficiencia energética desde el punto de vista de la construcción, “corresponde al mejoramiento térmico de las edificaciones, lo que permite generar beneficios económicos, sociales y medioambientales que contribuyen a mejorar la calidad de vida, permitiendo alcanzar temperaturas de confort y calidad del aire al interior de las viviendas”.
Se considera que al disminuir el consumo energético, generará ahorros en gastos de calefacción y se contribuirá a bajar el consumo de leña. A su vez, al disminuir la emisión de material particulado en el ambiente, junto con bajar la descontaminación atmosférica, se espera ayudar “a prevenir la aparición de patologías constructivas asociadas a humedad por condensaciones, aumentando la vida útil tanto en calidad como durabilidad de las construcciones, y disminuir los gastos en mantenimiento y costos de post-venta”.
El cumplimiento de estas exigencias se podrá acreditar mediante un Informe de Acreditación, un Informe de Ensayo, una Memoria de Cálculo, adopción de una solución constructiva inscrita en el Listado Oficial de Soluciones Constructivas para Acondicionamiento Térmico elaborado por el Ministerio de Vivienda y Urbanismo o mediante la incorporación de un material que, para cada caso, proponga el arquitecto del proyecto.
Estos cambios en las construcciones están en línea con los compromisos adquiridos por Chile en el Acuerdo de Paris, el cual se suscribió en 2015 junto a otros 195 países. El objetivo es limitar el aumento de la temperatura global en 2° centígrados.
En dicho acuerdo, adoptado en el marco de la XXI Reunión de la Conferencia de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, nuestro país se comprometió a reducir a 2030 en un 30% de sus emisiones de CO2 liberadas a la atmósfera, y con ello mejorar la eficiencia energética.
Luminarias también deben actualizarse
La eficiencia térmica no es el único ámbito que han alcanzado las actualizaciones de las normas relacionadas con el desarrollo inmobiliario. A partir de octubre de este año entra en vigencia la nueva Normativa de Contaminación Lumínica (D.S. 1 / 2022 MMA).
Esta regulación trae cambios que ponen énfasis en el cuidado de los cielos astronómicos, la salud de las personas y la protección de la biodiversidad, los cuales deberán ser considerados por los proyectos constructivos. Ello debido a que la normativa establece restricciones del alumbrado exterior de veredas, parques y áreas comunes; autopistas, carreteras y vías urbanas; la iluminación de fachadas de edificios y monumentos y de lugares donde se realizan actividades deportivas, como estadios.
Desde el Ministerio del Medio Ambiente (MMA) han señalado que el máximo del rango azul visible para el ser humano que emite una luminaria hoy en Chile es de 15%. Con la nueva norma ésta se reduce a un 7% en todo el país, extremando restricciones en áreas de protección especial, que incluyen Áreas Astronómicas y de Biodiversidad, donde debe alcanzar el 1%. En cuanto a plazos, en regiones sensibles se establecieron dos años. En el resto del país la norma deberá cumplirse cuando las luminarias sean recambiadas.
