Además, los campamentos aumentaron en más de seis mil familias entre el 2023 y 2025.
Por: Tomás Rodríguez Botto
El nuevo Catastro Nacional de Campamentos 2024-2025 de TECHO-Chile, reveló que en nuestro país se encuentran 120.584 familias habitando en 1.428 campamentos, lo cual significa la cifra más alta desde el año 1996. Sumado a que entre los años 2023 y 2025 aumentaron en seis mil las familias que habitan en campamentos.
En ese sentido, Gonzalo Rodríguez, director ejecutivo de TECHO-Chile, señaló que “la falta de herramientas y alternativas reales para salir de su condición mantiene a miles de familias estancadas en campamentos. El alto costo de los arriendos, los bajos ingresos y la necesidad de independencia son los principales factores que perpetúan esta tendencia, extendiendo los tiempos de espera por una solución definitiva a más de una década”.
Además, el estudio señala que actualmente más del 35% de las familias que vive en campamentos lleva al menos 14 años esperando una solución más definitiva.
En tanto, entre 2023 y 2025 se cerraron 346 campamentos; sin embargo, menos de un 30% de esos cierres corresponde a soluciones habitacionales definitivas. El resto se debe a desalojos, traslados, migraciones entre campamentos u otras estrategias de las familias para encontrar alternativas. De hecho, se estima que en ese periodo, al menos 1.710 familias fueron desalojadas y los datos muestran que la mayoría sin soluciones de vivienda definitivas ni temporales adecuadas, principalmente porque los desalojos no son acompañados con alternativas habitacionales.
Ante esta situación, Rodriguez, agrega que “la mayoría de estas familias sigue sin ser sujeto de política pública. Los campamentos representan hoy el 17% del déficit habitacional, por lo que no podremos enfrentar la crisis de vivienda sin abordarlos”.
Hoy, 229 campamentos están bajo amenaza de desalojo, y el 31,3% de los asentamientos reporta haber recibido avisos formales o informales, lo que afecta a más de 43.500 familias.