Este concepto es relativamente nuevo en el país, pero podría ayudar a bajar la crisis habitacional.
El Cohousing es un sistema de vivienda colaborativo en donde adultos mayores comparten espacios comunes para pasar su vejez. Actualmente, en Chile la población de personas de la tercera edad llega a 3,6 millones y se espera que esa cifra supere la barrera de los 6,2 millones en 2030.
En el país, esta práctica es un concepto nuevo y no se fomenta tanto como en naciones como Brasil, Inglaterra, Dinamarca (donde surgió el cohousing en 1970) y España, donde un buen número de personas mayores residen en viviendas colaborativas.
La Fundación Coushing en Chile es un actor relevante en el desarrollo de políticas públicas en colaboración con otras instituciones con el objetivo de mejorar la calidad de vida de los adultos mayores y así puedan tener un adecuado proceso de envejecimiento compartiendo entre ellos.
La directora ejecutiva de está organización, Gabriela Rosay comentó su visión sobre la práctica de este concepto en el país. “El panorama del cohousing en Chile es relativamente nuevo pero prometedor, especialmente dado el contexto social y demográfico actual del país. A medida de que la población envejece y cambian las estructuras familiares, cada vez más personas buscan alternativas a las formas tradicionales de vivienda, particularmente aquellas que promueven la calidad de vida, el apoyo mutuo y la sostenibilidad. El cohosuing puede ser una respuesta valiosa a estos desafíos, proveyendo un modelo de vida que apoya la interacción y cooperación entre generaciones y aborda la creciente preocupación por la soledad y el aislamiento social en la población mayor”.
Rosay comentó en como este sistema de vivienda puede ayudar a disminuir el déficit habitacional que existe actualmente en el país. “El cohousing representa una estrategia innovadora que podría contribuir significativamente a mitigar la carencia de vivienda en Chile, abordando no solo la cantidad de viviendas necesarias sino también mejorando la calidad y sostenibilidad de las soluciones habitacionales”.
En ese sentido, la directora ejecutiva indicó cinco puntos en los cuales este método podría ayudar a combatir está crisis los que son uso eficiente del espacio, diversificación de opciones de vivienda, estabilidad y reducción de la rotación, y promoción de viviendas sustentables.
La directora de la Escuela de Salud de la AIEP, Tatiana Soto en relación a este tema comentó que “estamos en los inicios, tenemos que entender que las personas tenemos que aprender a vivir en sociedad en un formato muy vigente. Esta mirada del cohousing es hacernos cargo de como va vivir el adulto mayor activo. Tenemos que gestar áreas especializadas y programas para el bienestar del adulto mayor”.
